Desde
que el hombre apareció desde la infinidad del tiempo, siempre ha
tenido la gran necesidad de saber que le deparaba el futuro. En todas
las partes del mundo hubo, habrá y aun hay métodos para poder
tratar de descifrar que nos puede traer de bueno o de malo el día de
mañana.
Ya
desde la antigüedad, tanto Platón como Cicerón concebían dos
formas de adivinación, una inductiva considerada como arte y otra
natural considerada como deductiva e intuitiva. Se consideraba que el
adivino era poseído por un genio o demonio, que le sumía en un
trance o manía, palabra de la cual deriva mantike (mancias o artes
adivinatorias).
Los
antepasados veían los elementos de la naturaleza como algo sagrado y
los utilizaban para fines adivinatorios, así podríamos dividir las
mancias en varias categorías como la adivinación mediante el aire,
el fuego, la tierra, partes de nuestro cuerpo, de los animales, etc.
Adivinación
mediante el aire.
Actinomancia:
Predicción
por medio de las estrellas.
Aeromancia:
Adivinación
por el movimiento de los vientos, forma de las nubes, etc.
Astromancia:
Predicción
del futuro por medio de la ubicación, el movimiento y el significado
de los astros.
Austromancia:
Consiste
en colocarse en una zona libre de obstáculos, para que estos no
desvíen el
viento y
realizar la pregunta. Hecho esto, observamos la fuerza y dirección
del viento para interpretar el augurio.
Puede
ser que no sople el viento o que este sea muy arremolinado y fuerte,
de modo que debemos esperar, pues se avecinan cambios con respecto a
lo que hemos preguntado. Por otra parte, una ligera brisa es una
buena señal.
En
cuanto a la dirección
del viento,
si proviene del oeste o del este, te hallas ante un estupendo
augurio, sobre todo para temas espirituales si proviene de Naciente.
Cuando el viento proviene del norte en un momento ideal para el amor;
el del sur es, en cambio, anuncio de dificultades, de malos momentos.
Ceraumancia:
Adivinación por medio de tempestades.
Caomancia:
Adivinación mediante la observación e interpretación de aspectos
atmosféricos.
Meteoromancia:
Basado
en la interpretación de los meteoros, los cometas, las estrellas
fugaces, etc.
Adivinación
mediante el agua.
Enomancia:
Es un método relacionado con la contemplación de agua y vino, en
una copa transparente partes iguales de agua y vino, se coloca una
vela detrás de la copa y se enciende, sentado frente a la copa se
formula la pregunta, se contemplara el vino iluminado y se esperara
ha que aparezcan símbolos.
Hidromancia:
Sistema
adivinatorio mediante la observación del agua basándose en sus
corrientes, color y flujos. El brillo de las aguas favorecía la
aparición de formas y figuras, siendo estas visiones muy subjetivas.
Adivinación
mediante el fuego.
Calcinomancia:
Basada
en el principio de las formas que adoptan algunos objetos lanzados al
fuego.
Capnomancia:
A través
del humo emanado de un objeto especial o de un animal sacrificado que
fuera echado al fuego.
Ceromancia:
Consiste en la interpretación que
toma la cera al derretirse.
Empiromancia:
Adivinación por las materias
diversas lanzadas al fuego y por el aspecto que toma el fuego después
de esta proyección.
Espadomancia:
Interpretación de las huellas que
quedan en las cenizas después de quemar objetos del consultante.
Molibdomancia:
Adivinación utilizada mediante
las figuras del plomo o del estaño fundido.
Piromancia:
Método que utiliza el fuego como
camino para adivinar el futuro.
Sideromancia:
Método que se utilizaba mediante
la interpretación del hierro fundido.
Teframancia:
Adivinación mediante
la interpretación de las cenizas.
Adivinación
mediante la tierra.
Cristalomancia:
Adivinación mediante la bola
de crista.
Geomancia:
Arte
adivinatoria que tiene que ver con la energía de la tierra y el
universo.
Iridomancia:
Adivinación
por medio del iris de los ojos.
Leconomancia:
Adivinación mediante piedras
preciosas.
Litomancia:
Interpreta
el aspecto y la forma de las piedras sin necesidad de sorteo. Se
fundamenta en el estudio de las “RUNAS”.
Sicomancia:
Método de adivinación en leer las formas de las hojas de las
higueras.
Taseomancia:
Adivinación por medio de los posos que dejan las hojas de té en el
fondo de la taza.
Vitreomancia:
Consiste en adivinar el futuro según las formas de la arena.
Adivinación
de alguna parte del cuerpo.
Amniomancia:
Adivinación que se hacia por
medio de la membrana amniótica con que algunas veces se halla
envuelta la cabeza de los bebes al nacer.
Antropomancia:
Adivinación que se hacia por
medio de la inspección de las entrañas humanas.
Onicomancia:
Conjunto
de procedimientos adivinatorios que utilizan una o varias uñas.
Quiromancia:
La
adivinación por las formas y líneas de las manos.
Adivinación
a través de los animales.
Alectomancia
o Alectriomancia: Era una
manera de predecir el futuro en el que se dibujaba las letras
alrededor de un gran circulo y se ponía granos de trigo en cada
letra, el orden en que el gallo se comía los granos revelaba un
mensaje, si por casualidad no había ningún sentido con respecto a
las letras seleccionadas por el gallo, el adivino las interpretaba.
Cuando el gallo terminaba de comer, el adivino interpretaba los
diseños que quedaban en el suelo.
Cefalomancia
o Celonomancia: Era un método
de adivinación que se practicaba haciendo diferentes ceremonias
sobre la cabeza cocida de un asno, estando muy en uso entre los
germanos.
Espatulomancia:
Adivinación por los huesos de los animales.
Ictiomancia:
Era un método de adivinación
en la que se echaba de comer carne a los peces, si la comían
inmediatamente era un buen agüero, pero si la rehusaban el resultado
era fatal.
Osteomancia:
Era un ritual en el que el
brujo o adivino sacrificaba generalmente una oveja, respondiendo
preguntas sobre el futuro mediante la observación de los huesos del
animal, dividiendo los huesos en 12 áreas o partes y de las cuales
se respondía una diferente pregunta sobre el futuro.
Ornitomancia:
Adivinación
por el vuelo o grito de los pájaros.
Ostracomancia:
Adivinación
por medio de las conchas.
Sauromancia:
Forma
de predecir los hechos que son anunciados por el comportamiento de
los lagartos.
Otros
métodos de adivinación.
Acutomancia:
Adivinación por medio de objetos puntiagudos, especialmente
alfileres y agujas.
Abacomancia:
Adivinación por medio de la lectura del Ábaco.
Belomancia:
Método de adivinación a través de flechas, generalmente se
utilizaban muchas fechas en las cuales se escribían frases y se
mezclaban entre si, después se escogía una al azar y se
interpretaba.
Caromancia:
Método de predicción principalmente cuando el adivino o brujo esta
bajo letargo o hipnosis.
Cartomancia:
Adivinación mediante las cartas del Tarot, la baraja española u
otro tipo de cartas.
Catoptromancia:
Sistema de adivinación mediante espejos.
Cleidomancia:
Adivinación por medio de las oscilaciones que hace una llave
suspendida de un hilo.
Cleromancia:
Adivinación mediante los dados.
Grafomancia:
Método de adivinación por la escritura (no tiene nada que ver con
la grafologia).
Gramatomancia:
Procedimiento adivinatorio por la obtención de las letras del
alfabeto escogidas al azar.
Lampadomancia:
Método de adivinación mediante las lamparas, antorchas o velas.
Lecanomancia:
Son todos aquellos procedimientos adivinatorios en los que se
utilizan vasijas o copas.
Libanomancia:
Método de adivinación a través del humo del incienso.
Necromancia:
Adivinación por la evocación de los muertos.
Onomancia:
Adivinación por medio del valor numérico de las letras que
conforman el nombre de la persona que consulta.
Palomancia:
Forma de predecir el futuro ayudándose de bastoncillos o varillas
preparadas.
¿Realmente
es posible adivinar el futuro?
La
respuesta en si es una incógnita, lo que si es cierto es que hay un
gran abanico de métodos usados, algunos totalmente extraños e
increíbles.